Dulce reflejo

Malostendendidos;

Palabras cruzadas sostenidas por pétalos caídos;

Evanescentes;

Una mascarade contemporánea con vestigios de otra época.

Aquí nada es lo que parece.

Te busco entre la gente y el jolgorio,

Las risas acontecen,

Suenan estridentes los magos conjurando abisales luminiscencias;

Dios me libre porque no estoy libre de pecado.

Alzo la vista sudorosa, buscando un lugar apacible donde entrar en calor

Me desvanezco

Me vuelvo invisible conjurando los poderes de la noche

La cara oculta de la luna es mi refugio;

y entonces, te hayo; como un destello fugaz en la lejanía

pero tú, ya no puedes verme.

Mi corazón se encoje como un puño helado pero punzante,

Y esos dedos que anhelan el calor hurgando en las entrañas en un templo de hielo.

Retumba el tintineo de un recuerdo arrollador,

Y en mi prenden los destellos de un vacío casi irresistible,

Tu risa desentrañando los misterios,

 tu mirada esclareciendo la negrura

Te busco para dejar de encontrarte,

¡Espejo mío me he perdido en el delirio!

Me acerco cautelosa

Con avanzares felinos,

Fulgurante instinto dispuesto a efervescer,

Pero entonces

Te desvaneces.

Te encuentro en todos y en nadie

Te escabulles a tu antojo,

Jugando al escondite

Quisiera gritar tu nombre

Pero alguien quiso plantar un rosal en mi garganta

y las espinas quiebran mi voz

Y sin embargo mi corazón late con fuerza y ruge desde mis entrañas.

Presunto convicto que lamenta, en palabras imprecisas, pareciera que desde algún lugar quisiera gritar:

¡Liberad a este preso de su carcelaria!

Pero los muros de su prisión apenas permiten el eco de un lamento relegado al olvido.

Y cuando toda fe parecía estar perdida,

Ahí donde solo el musgo y el fango sostienen el vacío,

Surgió una amapola

Y al desprender su aroma voló alto la curruca

que con sus alas al viento

acarició su soledad.

Se durmió en su regazo,

el recuerdo de un mendigo

que recordó en un instante

la ruta del naufragio,

hacia el fulgor y el olvido

hacia la tierra sagrada

hacia el cielo en su mirada.

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